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Caso documentado por Deyanira Zamora, 2013

 

En abril de 2012, campesinos, indígenas y organizaciones sociales de Arauca, protestaron en defensa de la soberanía y los recursos naturales de la región, frente a las agresiones que representaban para ellos las empresas explotadoras de petróleos. Las movilizaciones concluyeron un mes después con la firma de acuerdos entre las transnacionales, el gobierno y el pueblo. El incumplimiento de estos acuerdos llevo a que en enero de 2013 se reiniciara el movimiento pacífico exigiendo el fin de la crisis ambiental, laboral y social en la región. El 12 de febrero de 2013, tras la indiferencia del gobierno y las transnacionales, se inició un paro cívico general indefinido que culmino nuevamente bajo un acuerdo entre las partes el 18 de febrero de 2013.

 

La búsqueda y explotación de petróleo por parte de empresas transnacionales en Arauca comienza en 1959 generando un reordenamiento forzado del territorio, reduciendo el área de influencia de las comunidades y limitando las posibilidades de subsistencia de los pobladores. Ecosistemas como el Resguardo de San José de Lipa en la selva del Lipa, donde habita la comunidad Hitnü de la cual hoy solo existen 550 personas, fueron arrasados.

 

En el marco del paro se definieron cuatro mesas temáticas: inversión social (salud, educación y saneamiento básico), productividad (que incluía vías primarias, secundarias y terciarias), territorios, cultura y ambiente y una sobre la crisis humanitaria. Las Organizaciones Sociales de Arauca, con el apoyo del Movimiento Político de Masas de  Centro Oriente Colombiano, que convocan en enero de 2013, realiza concentraciones en los municipios de Arauca, Saravena, Tame y Arauquita sobre la línea de construcción del Oleoducto Bicentenario, impidiendo el acceso a los lugares de exploración y explotación petrolera. Ante la falta de presencia del estado y después del acercamiento infructuoso para el dialogo con el Ministro de Interior se incrementa gradualmente la acción de protesta y se declara paro cívico general e indefinido para todo el departamento.

 

Tras seis días de paro cívico general, el 18 de Febrero, las Organizaciones Sociales de Arauca levantan el paro afirmando que confiarían una vez más en la palabra del estado, que se comprometió con la comisión vocera a firmar y publicar el decreto presidencial exigido y poder acordar la instalación de las mesas temáticas y el programa de interlocución para avanzar en el pliego de exigencias. El 28 de febrero de 2013 se realiza una reunión que logra varios acuerdos para poner en marcha las mesas, Con la firma del decreto 285 del 27 de Febrero de 2013 por parte de la Presidencia de la República, se detienen las movilizaciones pues ya que se había logrado buena parte de los acuerdos. La pregunta por el cumplimiento oportuno de los mismos queda por verificarse­.

 

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